Llegan noticias de una de las más hermosas ciudades del centro de Europa. Repartido en más de 1.200 metros cuadrados, Club Woodward invita a una nueva escala en el bienestar de Ginebra. Con un spa Guerlain, la piscina cubierta privada más larga de la ciudad y un gimnasio perfecto, este club ultra exclusivo ofrece a los miembros servicios únicos para los viajeros más exigentes. El acceso al club privado está reservado para los huéspedes de The Woodward y un número selecto de miembros.
Con su decoración elegante, espacios generosos y acceso privado, Oetker Collection se complace en anunciar Club Woodward como la nueva dirección exclusiva de fitness y bienestar en Ginebra. Distribuido en dos plantas, el club cuenta con un Guerlain Spa de la marca francesa de belleza de lujo, un gimnasio equipado con máquinas Technogym de última generación y un espacio reservado para el entrenamiento con pesas.
Además de albergar la piscina cubierta privada más larga de Ginebra, el centro de bienestar incluye un jacuzzi, dos baños de vapor, dos saunas, una ducha de nieve, una ducha con cubo de hielo y dos baños suecos. Pero la ciudad no se queda sólo en eso. Hay decenas de atractivos que tientan a recorrerla y finalizar la jornada en el relajamiento de esta nueva idea.

El Museo Patek Philippe de Ginebra es considerado uno de los museos de relojería más importantes del mundo. Sus cuatro pisos albergan más de cinco siglos de historia de la relojería en dos colecciones importantes: la extraordinaria colección de antigüedades a partir del siglo XVI, que incluye el reloj más antiguo jamás fabricado y la colección Patek Philippe de 1839 en adelante.

Para quien le encanta navegar, hay muy pocas formas más tranquilas y relajantes de disfrutar los 72 km que separan a Ginebra de Montreux, deteniéndose para tomar un refrigerio en Nyon, Évian-les-Bains y Lausanne. El lago de Ginebra puede ser calmo, una idea perfecta para que la travesía requiera paciencia o un brillante velerista. La regata de agua dulce más prestigiosa de Europa, Bol d’Or Mirabaud, podría ser una tentación.
Para los amantes del vino, dos de las denominaciones Grand Cru más prestigiosas de Suiza, Dezaley y Calamin, se encuentran en la región vinícola más emblemática del país, Lavaux. Con una extensión de 30 Km entre Lausana y Montreux, los espectaculares viñedos en terrazas fueron establecidos por monjes durante el siglo XII y declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2016. Lavaux es casi tan conocido por sus rutas de senderismo como por su vino, por lo que se pueden combinar ambos. Buena idea para optar por una jornada con picnic.

La Organización Europea para la Investigación Nuclear, conocida como CERN, es una famosa organización de investigación europea que opera el laboratorio de física de partículas más grande del mundo. Establecida en 1954, la organización tiene sede en un suburbio del noroeste de Ginebra y recibe a los huéspedes en su centro de visitantes. Allí se puede descubrir lo que está sucediendo en el Gran Colisionador de Hadrones y escuchar a las personas que construyeron y ahora operan esta extraordinaria máquina y sus experimentos.
La vista desde un globo aerostático no tiene competencia. Algunas ideas tentadoras: ¿fondue de queso en el cielo? ¿Por la noche?

El famoso casco antiguo de Ginebra es maravilloso para explorar. Un breve paseo revela una fascinante mezcla de monumentos antiguos y elegancia contemporánea, incluidas esas tentadoras tiendas a lo largo de la “rue du Rhône”. Imperdibles: la catedral de Saint-Pierre, el Parc des Bastions y la muy querida Place de Neuve.
El Museo Internacional de la Cruz Roja, situado en la “Avenue de la Paix”, cerca de las Naciones Unidas, es un imponente edificio que fue renovado en 2013. Tiene tres áreas temáticas: Defensa de la dignidad humana; Reconstrucción de vínculos familiares; y Reducción de riesgos naturales. En la Cámara de los Testigos, 12 hologramas dan vida a la exhibición “Aventura humanitaria”.
Hay otros tesoros menos conocidos por descubrir, como el Musée Barbier-Mueller, con su colección de arte precolombino, actualmente combinada con el trabajo del fotógrafo Steve McCurry en una muestra que explora la idea japonesa de Wabi-sabi, o “Belleza en la Imperfección”.