Todo es barroco. El sitio desborda de color. El teatro de la gastronomía se expone entre telones y escenarios. Donde mires hay interés. Pani es una experiencia vacaciones ideal para vivirla en familia.

Hay desborde controlado. Nada está allí porque se les escapó. Hay una consciencia activa en lo que se propone. Los pasteles se ven en los colores y en los postres. Hay alegría por hacer y ofrecer. Convidar es algo que en Pani sale natural. Como en medio de una torta de cumpleaños permanente, cada plato es una celebración. Más allá de los sabores, la vista es novedosa y, como diría la abuela, la comida entra por los ojos.

La manera más milennial de crear un proyecto gastronómico aquí se hace realidad. No se trata de un sitio donde comer o tomar algo, es más bien un sitio donde ir a pasarla bien. No hay apuro porque comas y te vayas. Pero más allá de la parafernalia rockanrolera de tonos arcoiris, está la gastronomía. Es que todo lo demás se ha construido tras los cimientos del comer.

Para ir con chicos

Aunque no se trata de un espacio específicamente planteado para niños, es child friendly para los curiosos. La apuesta a la creatividad suma impacto desde los locales, el packaging y, claro, los platos, donde se animan a mezclar esos ingredientes que nadie más hace.

La impronta cool de Pani se define como un equipo de rebeldes pensando cómo sorprender; cada ingrediente, cada sabor y cada propuesta surge de su respeto y admiración por la cocina.

Las miniburguers para los peques simpre tientan, pero si tenés un pequeño gourmand, animate a compartir los platos adultos. La Polenta Pulenta llega acompañada de hummus de calabaza, guacamole y salsa de tomate, en una sabia reversión de los bastones de queso. El Club Waffle es una alternativa genial para hacer el miti miti. Lomito de cerdo ahumado, cheddar, palta, huvo frito, cebollitas caramelizadas, tomate, bacon, lechuga y mucha hambre. La burguesa, para los que no pueden evitar lo tipico pero se alejan del fast food es la gloria de los fans con cebolla caramelizada, huevo fruto, muzzarella, tomate y jamón.

La vida es rica

Sus tortas son disfrute pleno y convocan a la fiesta desde el nombre: Black Cookies Cake con Oreo; Cheescookie Milka explotada de dulce de leche y con muuuchas choco cookies; la clásica de la abuela Chola con avena, choco, dulce de leche y galletitas de agua; Kat Flora de dulce de leche, creamcheese con obleas de chocolate y dulce de batata; la Cheesecake bien argento de e dulce de batata, dulce de leche y Vauquita; la Vegan Star, un lanzamiento reciente con bizcochuelo de colores galácticos con ganache de choco y dulce de leche de soja, ubierto con frosting de crema multicolor y baño de chocolate; Hard Candy, Humedo de chocolate, cremoso de maní, ganache de chocolate blanco y dulce de leche con baño toffee; Orange is the new pie, curd de naranja y merengue italiano sobre base de honey cookies; Mi Prefe, un cuadrado de ricota y limón con dulce de leche y crumble; Blondie cake, con cookies de vainilla, chocolate blanco y baño de dulce de leche; Apple Nori con manzanitas caramelizadas y frutos secos; Key lime pie… y la lista sigue!